Abri la primera caja y empece a oir tu voz, pero con dialogos que ya conocia y tenia en mi mente...Mire dentro de la caja y observe una escena...Eramos nosotros en aquel parque de ojas secas, ese en el que jugamos con ellas y con el viento de invierno que iba y venia, donde nos reimos y nos contamos mil y unas cosas que hasta el día de hoy no he olvidado, en aquel lugar donde primera vez senti de verdad tu compañia y tu cariño más alla de simples palabras dichas por uno u otro lugar...
Cerre la caja con una sonrisa en mis ojos y decidi abrir otra y otra y otra...Mi infancia, mi vida escolar, mis recuerdos alegres y tristes de diferentes pasares y caminos que fui tomando durante mi vida, iban saliendo en voces e imagenes de cada una de las cajas que había en mi alrededor...Me rei con algunas, con algunas hasta llore, con algunos recorde momentos hermoso y en otras no tanto, en todas ellas tuve una reacción distinta que reflejaba los distintos momentos que he vivido en mis casi veinte años de vida.
Decidí dejar las casa cerradas y en su lugar, no abrí otras porque ya me sentía muy cansado...Pero tu volviste a hablarme y de la nada dijiste: "Dame tu mano" Yo, aún sin poder verte estiré la mano, imaginando tenerte a mi lado, cuando de la nada senti que alguien se aferraba a ella, pero esa cosa, esa persona era una sombra oscura oculta entre la ya existente oscuridad de mi alma...Grite fuerte e hice que apareciera una tenue luz sobre esa sombra y así pude descubrir...Eras tú...
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